TRASLATE

domingo, 27 de enero de 2013

PEÑA CABRERA



        
         


     Cuando el día comienza mal, termina mal, esto es una verdad como un castillo de grande. Cuando llegué al punto de partida del sendero de Peña Cabrera lo primero que eché en falta fue la mochila con la comida, el agua y el botiquín. Lo segundo fueron los bastones. Después de aguantar el "un día de estos te vas a dejar la cabeza..." que mi mujer se encargó de recalcarme un par de veces, comenzamos la subida a la peña, los primeros dos kilómetros fueron bien, pero cuando vi que el camino iba cuesta abajo, me dije "..algo va mal..", efectivamente me había equivocado de camino y fuimos a parar a un arroyo. Media vuelta y a escuchar.."¿ pero tu sabes a donde vamos?..Mi mosqueo iba en aumento, gracias a dios llegamos a la Era, desde donde empezamos a buscar los abrigos, y digo bien..a buscar, porque lo que es encontrar, nada de nada. Muchas cuevecitas pero ninguna con pinturas y eso que estuvimos una hora y media buscado. Pero no acaba todo ahí, cuando me pongo a cargar la ruta en Sportraker, no se que coj..pasa que no sube. Bueno al final nos contentamos con coger espárragos para una tortillita, por lo menos me iré a la cama con buen sabor de boca.