Pequeñas rutas de senderismo por la provincia de Málaga para disfrutar de la naturaleza y el medio ambiente.
CAMINANTE NO HAY CAMINO,
SE HACE CAMINO AL ANDAR.
Vuelta a la Sierra de las Nieves, esta vez queríamos hacer la ruta Yunquera-Los Sauces, pero el cambio de tiempo inesperado y la bajada de temperatura hizo que nos diéramos la vuelta en el mirador natural, donde pudimos contemplar las maravillosas vistas del convento de las nieves y el área recreativa de los Sauces, por lo cual bautizo esta ruta como Yunquera-Mirador del convento. La ruta, muy bonita, en constante subida y muy buen sendero. El desnivel acumulado lo sentimos en las piernas y seguramente mañana no podré dar un paso por las agujetas.
A pesar de la lluvia y el frió, decidimos emprender la ruta Istán-Cañada del infierno, en el Parque Natural de la Sierra de las nieves. Al final no pudimos completar la ruta ya que la intensa lluvia nos hizo abandonar a un kilómetro de nuestra meta.
Agradecer al Ayuntamiento de Istán que mantenga abierta la oficina de información turística en domingo, cosa que muy pocos municipios hacen. Nos atendieron muy amablemente, dándonos toda la información que pedimos y un libro con todas las rutas de los alrededores.
Como punto negativo decir que la falta de aparcamientos en el pueblo nos hizo desistir de comer en uno de los restaurantes del pueblo, ya que tres vueltas completas al pueblo buscando aparcamiento eran suficientes para que nos marcháramos sin conseguirlo.
Por otro lado creo que este es uno de los senderos más bonitos que he recorrido ya que en todo momento estamos en plena montaña rodeado de bosque, una de las cosas que más me gustan. La lluvia constante añadió un aliciente más a la ruta.
Inicio del sendero, nacimiento de Arroyo Molinos.
El manantial.
Visitar esta zona; recomendable.
Vistas de Istán desde la ruta.
Los almendros en flor salpican el paisaje.
La lluvia arrecia, el camino muy bonito.
El camino está en todo momento bien señalizado.
Subiendo al primer puerto.
Sin palabras.
Dátiles de palma en pleno mes de febrero ¡increíble!
El sendero no se pierde en ningún momento.
Subida al segundo puerto.
Sigue la lluvia y el frío, decidimos regresar a tan solo un kilómetro de la meta.
