Teniendo como horizonte la impresionante pared de Sierra Huma, el sendero se encamina hacia las mismas
estribaciones del macizo. En la zona se conserva uno de los yacimientos de fósiles marinos más interesantes del
Jurásico.
Durante su recorrido puede contemplarse una estupenda panorámica que abarca el reducto histórico de lo que fue en
su día la esplendorosa ciudad mozárabe de Bobastro (s. X), el pantano del Conde de Guadalhorce y los Tajos de
Haza del Río que dan cobijo a una colonia de buitre leonado.
Como principales ecosistemas se observan pinos carrascos, piñoneros, encinas y eucaliptos, entre otros que son los
que configuran el estrato arbóreo acompañado de matorral típico mediterráneo con predominio de sabinas, enebros,
retama y palmito entre otros.
También es posible observar a la cabra montés como una de las especies más características de esta zona.
Cualquier época del año es buena para realizar este sendero si bien es preferible hacerlo en primavera y otoño.